Vino Pinto Punto, es el resultado de expresar mediante una etiqueta la actividad que desarrolla una empresa dedicada al networking.
No es fácil encontrarnos con propuestas como esta sobre envases convencionales como es el caso de las botellas de vino, pero Xisco Barceló, ha dado en el clavo con esta creación. Se trata de representar sobre las etiquetas de este vino, un juego en el que el destinatario se hace partícipe al decorar de forma personalizada cada una de las botellas. Una idea muy similar a la de los cuadernos de pasatiempos infantiles, en la que queda reflejada la sinergia de negocio entre las empresas.
Sin duda, esto nos abre un abanico mucho más amplio en el mundo del vino, un producto conservador que poco a poco se hace eco de propuestas creativas como esta, que rompen de algún modo el convencionalismo y nos abren nuevos caminos para interactuar.
Vía Gráffica