La verdad que siempre hemos querido fichar para Pentsaleku un trabajador nato de esos que no se achican por nada y dan siempre la talla. Así que pentsando, pentsando…, se nos ocurrió llamar a la fábrica de chocolate a ver si nos podían enviar un Oompa Loompa, (sí, esos personajes pequeños con gran talento que parecen ser incansables) para que nos ayude en nuestra creatividad diaria.
Como no era menos de esperar, Charlie nos atendió encantado y nos dijo que nos enviaría su mejor Loompa para nosotros. En una semana lo hemos recibido y ya forma parte integrante de nuestra plantilla.
De momento hablar, lo que se dice hablar, no habla mucho y también es cierto que tenemos que ayudarle a cambiar de postura continuamente, pero la verdad es que estamos encantados con él y hemos decidido hacerle un contrato indefinido, sí sí, indefinido, ya se que en estos tiempos que corren suena como a utopía, pero creemos que el personaje se lo merece.
Lo que si que nos preocupa un poco, es que cuando oye la palabra Medicom se pone a temblar y le da algún que otro espasmo, pero bueno, nos imaginamos que con el tiempo se le pasará.
¡Muchas gracias Charlie!